Pointer, un viaje alrededor del mundo a través de sus platos
Pointer, un viaje alrededor del mundo a través de sus platos
Tan sólo un año después de que Teckel abriera sus puertas, sus socios han puesto en marcha una nueva aventura: Pointer. Sin dar de lado el concepto canino que les caracteriza, este nuevo local pretende ser un viaje de experiencias a través de lo que mejor saben hacer: cocinar. Prepara cuchillo y tenedor ¡porque allá vamos!
¿Conoces la increíble terraza de Teckel? Pues su misma autora, María Villalón Puras, ha sido quien se ha encargado de poner orden en la decoración de Pointer. Las 300 personas que puede llegar a albergar el local, podrán disfrutar de tres espacios muy diferenciados inspirados en los barrios más emblemáticos de Nueva York.
Sombrero, barba y pantalones pesqueros. Seamos sinceros, Malasaña está muy bien pero Williamsburg es otro cantar. El barrio más trend de la Gran Manzana tiene cabida en la planta baja de Pointer gracias a un diseño neoindustrial.
El oeste de Long Island llega hasta Madrid ¿O es al revés? El sabor y el aroma de Brooklyn toman forma en Pointer gracias a un diseño basado en ladrillo visto, techos industriales, maderas envejecidas y chapas metalizadas.
Nos vemos en East Village, no llegues tarde. Desde la primera planta de Pointer, podrás disfrutar de un espacio inspirado en uno de los vecindarios más de moda de Nueva York. Un espacio en el que las tonalidades azules toman protagonismo y en el que el microcemento y el papel pintado se intentan hacer un hueco. Todo esto con la Plaza de Colón en el horizonte.
Sí, sí… ya están a punto de salir los platos. Pero antes necesitas saber que Pointer, al igual que su hermano Teckel, cuenta con una terraza. Ésta se podrá integrar en el corazón del restaurante gracias a la apertura de sus grandes cristaleras. Y si lo que buscas es intimidad, el local tiene un salón privado con una majestuosa mesa acompañada por ventanales y vitrinas llenas de hechos pasados y recuerdos.
Ahora sí. Ten lista la servilleta y forra el teclado con plástico. El objetivo de Pointer es que puedas viajar alrededor del mundo en cada bocado. ¿Qué es lo que no puedes perderte? Bueno, podemos empezar por unas croquetas de pollo en pepitoria, unos deliciosos tacos de jaiba con un chupito de guacamole o el risotto de pichón y setas.
Si te autodenominas carnívoro de ley, tienes que lanzarte a por el Black Angus Prime procedente de Nebraska. Otras creaciones imperdibles son la ensalada de quinoa con gambones, los míticos Mac & Cheese o el sándwich de langosta.
Sabemos que se te ha abierto el apetito, como a nosotros. En Meridiad la gastronomía es una de nuestras pasiones y hemos llevado a cabo diferentes proyectos para varios restaurantes.